Cómo cambiar un foco LED en 10 pasos

Por Lucas Cejas de BAUHAUS Mallorca

Están en calles, bares, casas, estadios, parques, coches… El led ha cambiado nuestras vidas para bien y ha llegado para quedarse. Sus beneficios lo convierten en la opción más económica y ecológica del mercado.

Una sencilla acción como es la de cambiar un foco puede contribuir al ahorro en el consumo y a la eficiencia energética de nuestros hogares.

Los avances tecnológicos han permitido el desarrollo y crecimiento del mercado de las bombillas LED.

El gran punto a favor del LED es el ahorro energético, pues disminuye hasta un 80% el consumo convirtiendo al LED en un producto altamente eficiente desde el punto de vista del ahorro de energía eléctrica.

El segundo punto a favor es la mayor durabilidad, pudiendo durar un led hasta unas 50.000 horas (basado en un consumo de 8 horas diarias), contra unas 8.000 de las bombillas fluorescentes.

En BAUHAUS te ayudamos para que escoger una bombilla LED no sea tan difícil.

A continuación, explicaremos una serie de pasos para dejar de lado los focos halógenos que usted tiene en su casa, y así pasar definitivamente a la tecnología LED, tomando como ejemplo un típico caso de sustitución de un halógeno con transformador.
Antes que nada, usted solo necesitará dos herramientas: un par de guantes de trabajo, y un destornillador.

El primer paso, y el más importante desde el punto de vista de la seguridad, es apagar el interruptor general de la corriente eléctrica.

Comprobaremos en algún interruptor de la misma habitación la ausencia de tensión, encendiendo el interruptor.

¡Ahora si ya podemos comenzar!

Paso 1

 Con la ayuda del destornillador quitaremos el aro que sujeta el foco.

Paso 2

Luego quitaremos el portafoco, prestando especial. Poner especial atención a los muelles que sujetan el portafocos al falso techo.

Paso 3

Vamos a desconectar cuidadosa y lentamente la bombilla halógena.

Paso 4

Ahora tiramos del cable lentamente y sacaremos el transformador del falso techo.

Paso 5

El siguiente paso es desconectar el transformador de los cables. Cogemos el destornillador y desatornillamos los cables que vienen del techo con el transformador.

Paso 6

Una vez que tenemos los cables libres del transformador, cogemos el nuevo portalámparas LED, y conectamos los dos cables de fase y neutro a la regleta de conexión del nuevo portalámparas.

Paso 7

Para evitar un hipotético cortocircuito, revisaremos que no sobresalga cobre de la regleta.

¡Ya tenemos la conexión hecha!

Paso 8

Colocamos nuevamente el portafocos al falso techo.

Paso 9

¡Ya casi estamos!

Ahora insertamos la bombilla LED en su portalámparas (de tipo gu10) y vamos a girar unos 90 grados.

Paso 10

Finalmente colocaremos nuevamente el aro que va a sostener la bombilla led.

¡Y hemos finalizado!

Tabla de equivalencia entre bombillas

A la hora de sustituir las bombillas halógenas o de bajo consumo por bombillas de LED, es importante saber cuál es la equivalencia de las bombillas. Si no, corremos el riesgo de quedarnos cortos de luz o de deslumbrarnos. A continuación mostramos una tabla de la equivalencia de las bombillas.





Tonalidad de la luz

La tonalidad de luz a elegir para las diferentes estancias, es una de las preguntas más habituales de nuestros clientes. Antiguamente no había mucho donde elegir, pero en la actualidad hay más opciones. Aquí explicamos las diferentes tonalidades que podrás encontrar. Se hace llamar KELVIN, siempre vendrá marcado en el embalaje de la bombilla.

Tonalidad 6000-6400K: Este es el tipo de luz más elegido para las cocinas, debido a que la alta luminosidad y claridad de este tipo de luz, permite tener claridad a la hora de cocinar y preparar comida en general.

Tonalidad 4200K: También elegido en muchas cocinas, es una tonalidad frecuente en baños. Un tono menos estridente que la luz en 6000K, permite tener alta luminosidad sin ese tono azulado.

Tonalidad 2700-3000K – Luz Cálida: Para el resto de la vivienda, siempre recomendamos la luz 3000K. Imita la bombilla incandescente y crea una ambiente mucho más acogedor y relajado.