Pinta tu piscina con la selección de pinturas con distintos colores y acabados que BAUHAUS ofrece para ti.

La piscina, como muchas superficies, necesita protección en los meses de más calor y por el desgaste continuo que sufre con el agua y el cloro, entre otros productos químicos. 

A la hora de elegir la pintura tenemos dos opciones: clorocaucho y al agua.

Hay que tener en cuenta que  estos dos productos son incompatibles y que si vamos a repintar una piscina tendremos que utilizar la misma pintura con la que lo hicimos la primera vez. Si lo hemos olvidado es mejor que utilicemos la pintura al agua.

Pintura al clorocaucho: Se trata de una pintura con disolvente que se puede utilizar en interior y exterior y sobre materiales como cemento, mortero, hormigón y piscinas. Se trata de un producto impermeable, con buena resistencia al agua y resistencia a la alcalinidad. Tiene un secado rápido (30 a 60 minutos) y una excelente adherencia. Una vez pintada la piscina, es obligatorio esperar dos semanas (dependiendo del clima que haga) para proceder a su llenado de agua.

Pintura al agua: se compone a base de resinas acrílicas especiales en un medio acuoso y pigmentos de alta solidez. Es un producto adecuado para la protección y decoración de piscinas, cuyas superficies son de mortero de cemento y otros derivados. Para aplicar el producto hay que hacerlo en capas uniformes bien extendidas. Podemos utilizar una brocha y pistola Airless y diluir el producto con agua y removerlo bien antes de aplicarlo. Se recomienda no llenar la piscina hasta transcurridos ocho días.